El ritmo hierve

Los niños del IPS Geithain recibieron una sorpresa muy especial la primera semana de clase. Javier, el llamado cocinero del ritmo, fue invitado a nuestra escuela para presentar su "batería" y sus habilidades a los niños y animarles a participar. Muchos de nuestros niños también pudieron ser ellos mismos los "cocineros".

Todos -alumnos, profesores y educadores- quedaron especialmente impresionados por la poco ortodoxa batería de Javier, compuesta, por ejemplo, de ollas, sartenes y un gran bidón de agua. Los utensilios de cocina no se tocaban con los palillos habituales, sino sobre todo con batidores. Esto no sólo fue divertido, sino sobre todo sorprendente, ya que los sonidos resultantes demostraron que es posible construir una batería con objetos tan cotidianos.

Además de breves juegos, Javier animó a los niños a participar. Además de los ritmos de palmas, se les animó a cantar, zapatear y bailar. Ningún niño permaneció sentado en los bancos. Incluso los juegos les animaban literalmente a saltar y bailar. Ni siquiera los adultos pudieron contenerse.

En resumen, fue un gran programa práctico para todos los presentes. En sólo una hora, los niños se introdujeron en el tema del "ritmo" de una forma lúdica. Se divirtieron mucho y también pudieron poner a prueba sus habilidades musicales. Gracias Javier por este magnífico programa. Te invitamos a que vuelvas. 😊